Ventajas del bromo
Una de las principales ventajas del bromo es la seguridad, ya que no solo no provoca daños para la piel, los ojos o el pelo, sino que además es capaz de mantener un alta grado de eficacia con altos niveles de pH.
Por poneros un ejemplo, no es extraño que en un spa o en una bañera de hidromasaje se llegue a alcanzar un nivel de pH 8, cuando lo idóneo es que oscile entre 7 y 7,4. Pues bien, aún en estas circunstancias, el bromo mantiene una eficacia cercana al 90%, mientras el cloro apenas se mantendría en un 30%
Además las piscinas con bromo no desprenden olor a cloro ni irritan la piel ni los ojos.
En cuanto al pelo y la ropa de baño, pueden estar tranquilos, ya que no destiñe.
Ventajas del sistema de dosificación automática de bromo
Al usar un sistema de dosificación automática, la carga de trabajo que supone el mantenimiento de la piscina se reduce considerablemente.
Al dosificarse de forma continuada se garantiza un agua desinfectada. El único trabajo que tendrán que realizar, será rellenar el brominador con regularidad (aproximadamente cada dos semanas), asegurándose que nunca se quede vacío.
Origen del bromo
El bromo es descubierto en 1825 por Carl Jacob Löwig (17 de marzo de 1803 – 27 de marzo de 1890) un químico alemán que estaba llevando a cabo una investigación en aguas de pantano que eran ricas en bromuro de magnesio. Cuando se elimina el cloro y se inyecta gas en la solución, surge el bromo.
A partir de sus investigaciones, las aplicaciones del bromo se fueron perfeccionando y, expandiendo. Después de estudiar todas sus propiedades, se empezó a fabricar bromo para piscinas el cual tiene como objetivo dejar el agua libre de microorganismos. Actualmente, esta sustancia posee muchas finalidades, la más conocida es la producción del color “morado” aunque os pueda parecer extraño; también se emplea en la producción de bromo de etileno, como retardador de llama, en campos de la medicina, fotografía, en la producción de aceites, en pinturas etc.